En un entorno global caracterizado por la incertidumbre, las empresas peruanas, al igual que en el resto de Latinoamérica, enfrentan la necesidad imperiosa de transformarse. Si bien en los últimos años muchas han hecho importantes avances en esta tarea, para asegurar su capacidad de adaptación y crecimiento será crucial que redoblen sus esfuerzos impulsándose en la tecnología. Según encontró el estudio Desafíos y tendencias para las empresas en Latinoamérica 2024, seis de las siete principales tendencias que afectarán a las organizaciones en Perú en los próximos tres años están directamente relacionadas con la innovación tecnológica.
Sin duda, la transformación digital sigue siendo un tema importante para las compañías: más del 50% de los ejecutivos consideran que la automatización de procesos y la digitalización son fundamentales para mejorar la eficiencia operativa. Tecnologías como la inteligencia artificial, big data, y cloud computing están en el centro de esta transformación. Además, la implementación de herramientas como asistentes virtuales y el avance de la conectividad 5G preparan el terreno para una era de digitalización avanzada que promete revolucionar tanto los procesos internos como la interacción con clientes.
Entre los desafíos internos más mencionados por los ejecutivos encuestados se encuentran la necesidad de equilibrar la visión a largo plazo con la situación actual de la empresa y no postergar decisiones cruciales de modernización tecnológica. Además, refieren que es importante fomentar una cultura digital que no solo impulse la adopción de nuevas tecnologías, sino que también desarrolle las habilidades necesarias en los colaboradores para gestionarlas de manera efectiva.
Uno de los principales obstáculos en este camino es la integración de nuevas tecnologías con los sistemas existentes. El 47% de los ejecutivos peruanos señala que la integración y el mantenimiento de plataformas automatizadas es un reto significativo. A esto se suman las restricciones presupuestarias, que limitan la inversión en innovación, y la necesidad de garantizar la seguridad y protección de los datos, un aspecto que toma relevancia en un mundo cada vez más conectado.
La ciberseguridad y el marco regulatorio también se perfilan como prioridades clave. La protección de datos personales y empresariales se ha convertido en un imperativo, en medio de la creciente adopción de tecnologías disruptivas. Las empresas no solo deben adoptar soluciones tecnológicas, sino también asegurarse de que estas estén adecuadamente protegidas frente a amenazas cibernéticas que podrían comprometer tanto la integridad de sus operaciones como la confianza de sus clientes.
En resumen, los próximos tres años para las empresas peruanas estarán marcados por la necesidad de abrazar la transformación digital, impulsada por tecnologías disruptivas. La adopción de inteligencia artificial, automatización y big data, junto con la consolidación de una cultura de innovación, serán determinantes para su éxito en un mercado en constante cambio. Sin embargo, el desafío será integrar estas herramientas de manera eficiente y segura, garantizando no solo la mejora operativa, sino también una ventaja competitiva sostenible.
(Forbes.pe)
