El Perú muestra un gran potencial para la inversión y el desarrollo de startups, aunque enfrenta desafíos para acelerar su crecimiento. Según el reporte de ‘Inversiones de Capital Emprendedor Peruano’, realizado por la Asociación Peruana de Capital Semilla y Emprendedor (PECAP), el monto total invertido en startups peruanas en 2022 fue de US$ 87 000 000, casi el doble de lo destinado en 2020.
Sin embargo, José García Herz, presidente de la PECAP, indica que, en 2023, el sector de venture capital, vinculado con las inversiones en startups (emprendimientos innovadores con alto potencial de crecimiento), enfrentó desafíos significativos debido a la incertidumbre económica mundial, la volatilidad en los mercados financieros y cambios en las políticas gubernamentales.
“La menor liquidez disponible para activos alternativos complicó la inversión para las startups, aunque se ha notado un aumento en la cantidad de las rondas pequeñas, lo que indica que las startups siguen emergiendo en nuestro país, una tendencia positiva”, comenta el especialista.
En cuanto a las industrias que realizan mayores inversiones en estos emprendimientos, García Herz menciona a las fintechs (finanzas tecnológicas), e-commerce y edtech (aprendizaje tecnológico).
Necesidad de más recursos
Para la aceleración de las startups en nuestro país, el presidente de la PECAP señala que, al igual que en otros países de la región, el Estado debe comprometer más recursos para apoyar el ecosistema emprendedor, ya que hoy existe un número limitado de instituciones de apoyo como incubadoras y aceleradoras, que dependen en gran medida del respaldo gubernamental.
“Para darnos una idea, la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo) de Chile ha invertido más de US$ 1 000 millones en fondos de capital de riesgo o capital emprendedor desde 1998, mientras que el fondo de la Corporación Financiera de Desarrollo (Cofide) del Perú es de solo US$ 20 000 000”, explica el experto.
Con la mayor inversión realizada por Chile, comenta el representante de PECAP, se ha catalizado mucha inversión del sector privado chileno (family offices) y ha tenido un impacto significativo en la inversión que atraen las empresas chilenas.
“Además, el monto de corporate venture capital (CVC) en Chile es muy alto. Es por ello que, en 2023, el monto de inversión en startups en Chile fue de casi US$ 900 000 000, mientras que en Perú alcanzó solo US$ 50 000 000”, agrega.
Impulso de las fintechs
Roberto Vargas Buendía, presidente de la Asociación de Fintech del Perú, comenta que la industria fintech, que impulsa al ecosistema de las startups, continuará su crecimiento en el país a una tasa interanual de 20 % aproximadamente, considerando las actuales condiciones.
“Proyectamos que lo mismo ocurrirá en otros sectores de startups debido a la capacidad creadora y creativa de los peruanos, el mayor interés de personas jóvenes y mayores por desarrollar software, la transferencia de conocimiento y tecnología de jugadores internacionales y por el avance de la inclusión financiera en el país”, resalta Vargas.
En diciembre de 2023, se publicó el Radar Fintech de VISA para Perú. Según esta investigación, existen 288 fintechs operando en el país y una de cada tres es extranjera.
“Esto convierte al Perú en uno de los destinos de internacionalización más importantes de la región después de Brasil y México”, destaca Vargas.
“En el mundo, desde los bancos más grandes hasta gremios empresariales estratégicos de los países, desarrollan proyectos de envergadura para promover la inclusión financiera, elevar la competitividad en el comercio internacional o incrementar el nivel de bienestar de los ciudadanos en su día a día. Esto ha ayudado a impulsar a las startups en el sector fintech”, señala el experto.
Impulso privado
Si bien son muchas las variables para dinamizar el ecosistema de startups, Lucia Martti, gerente de Open Innovation de Wayra en Perú, comenta que el punto crucial es el involucramiento de la empresa privada, no solo desde la inversión, sino generando oportunidades de negocios a través de las startups.
“En los últimos tres años hemos visto un incremento en la región de corporativos con iniciativas de CVC, duplicando su número a 70. Este modelo ha impulsado a muchos corporativos a formar sus CVC, estableciendo bases para el trabajo conjunto entre corporativos y startups”, precisa la especialista.
Impulso desde la CCL
Para acelerar el crecimiento del ecosistema de startups en el Perú, Cecilia Chia, coordinadora del Centro de Innovación de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), señala que es fundamental fortalecer la colaboración entre los sectores público y privado y la academia; mejorar el acceso a financiamiento y fomentar la cultura de la innovación y emprendimiento desde la educación básica hasta la universitaria.
De acuerdo con el ‘Global Startup Ecosystem Report 2023’, de Startup Genome, la integración de políticas públicas que apoyen la innovación y el emprendimiento, como incentivos fiscales y la simplificación de trámites burocráticos, es esencial para el crecimiento de startups. En esa línea, Chía menciona que el establecimiento de incubadoras y aceleradoras, así como los programas de mentoría y networking, son clave para apoyar a los emprendedores en sus primeras etapas.
“La CCL, a través de su Centro de Innovación, fomenta la creación de startups mediante iniciativas y programas diseñados para apoyar a los emprendedores en cada etapa de su desarrollo. Esto incluye la organización de talleres y capacitaciones en áreas clave como gestión empresarial, ideación y prototipado, marketing digital y levantamiento de capital”, comenta Chia.
Según el informe ‘Innovación y Emprendimiento en América Latina 2024’, del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la formación y capacitación continua son cruciales para el éxito de nuevas empresas. En ese sentido, la especialista del Centro de Innovación de la CCL explica que desde el gremio empresarial proporcionan espacios de networking, acceso a una red de especialistas y conexiones con potenciales inversores, creando un entorno dinámico y colaborativo que facilita el crecimiento y la sostenibilidad de las startups peruanas.
En cuanto a los retos del ecosistema de startups en Perú, la representante de la CCL sostiene que los líderes de estos emprendimientos enfrentan varias dificultades, entre ellas la limitada disponibilidad de financiamiento, la falta de una cultura de innovación consolidada y la burocracia que complica la creación y formalización de nuevas empresas.
De acuerdo con el reporte ‘Startups en América Latina: Retos y Oportunidades 2023’, del BID, estos desafíos son comunes en la región y requieren un enfoque multifacético. Chia explica que, para abordar estos desafíos, la CCL puede desempeñar un papel crucial promoviendo políticas públicas favorables a la innovación, ofreciendo programas de formación específicos para emprendedores y facilitando el acceso a redes de inversión.
“Asimismo, mediante la colaboración con instituciones educativas y tecnológicas, podemos fortalecer la infraestructura y el soporte necesario para que las startups prosperen en un entorno competitivo”, señala.
En conclusión, aunque el ecosistema de startups en Perú enfrenta desafíos significativos, el panorama es prometedor. La capacidad creativa de los peruanos, el creciente interés en la tecnología y la inclusión financiera, junto con el potencial para aumentar la inversión tanto pública como privada, sientan las bases para un futuro vibrante. La colaboración entre el sector público, privado y académico, junto con el apoyo de iniciativas como las de la Cámara de Comercio de Lima, son esenciales para superar las barreras actuales y acelerar el crecimiento de las startups. Con políticas adecuadas y un enfoque multifacético, Perú puede convertirse en un centro de innovación y emprendimiento en la región, aprovechando su talento y creatividad para impulsar su desarrollo económico y social.
(lacamara.pe)