
Muchas actividades económicas se van transformando con el tiempo. En el caso de la minería, la innovación, la tecnología y una mayor preocupación por su impacto ambiental han sido elementos críticos en años recientes no solo para su sostenibilidad, sino también para dinamizar y diversificar la producción de las empresas. Leandro García ha sido testigo de estas transformaciones en la minera de origen peruano Buenaventura.
El actual CEO de la compañía, cuyas ganancias llegaron a US$402,7 millones en 2024, empezó como asistente de finanzas en 1990, poco antes de acabar su segunda carrera en la Universidad del Pacífico (primero estudió Administración y luego Contabilidad). Por una década, hasta el año 2000, ocupó cargos en el área de finanzas de la empresa. Luego, en 2011, volvió a la compañía como contralor general y, en 2020, se convirtió en su CEO. Asegura que no se imaginaba ser hoy gerente general de la compañía que le permitió dar sus primeros pasos profesionales. “Soy el primer gerente general que no es técnico en minería”, menciona García, quien, antes de asumir su actual puesto, se desempeñó como vicepresidente de Administración y Finanzas de la minera.
De hecho, la experiencia de García hoy está en sintonía con el énfasis que tienen los costos y las finanzas en las decisiones de negocio de la minera. “Por eso nos demoramos tanto en hacer los estudios de factibilidad. Analizamos ciertos escenarios y hacemos muchas pruebas, en temporada seca, en temporada de lluvia, a ver cómo reaccionan todos los factores involucrados en la mina. Se invierte en ese detalle para tomar una buena decisión”, señala García. De hecho, pone como ejemplo el estudio de factibili- dad de Trapiche (un proyecto de cobre de tajo abierto ubicado en la región Apurímac), el cual, según el CEO, es- tará listo en 2026, dos años después de que se realizara el estudio de prefactibilidad. “Se invierte en pruebas, ejercicios, análisis metalúrgicos. Es preferible hacer esa inversión que no haber contemplado ciertas partes del proceso y tener que corregir en el camino”, comenta el ejecutivo peruano.

DIVERSIFICACIÓN Y PLANES
Actualmente, Buenaventura tiene ocho unidades mineras en funcionamiento. Y la diversificación es algo muy presente en su estrategia, destaca García. Sus minas Orcopampa, Tambomayo, Coimolache y La Zanja están orientadas principalmente a la producción de oro. Asimismo, Uchucchacua, Julcani y Yumpag están enfocadas a la de plata y El Brocal, a la de cobre (además de otros metales, como zinc y plomo). “Esta diversificación minera permite a Buenaventura mantener una participación sólida en los principales mercados metálicos”, señala García.
En febrero de este año, la empresa estimó en un comunicado enviado a la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV) que la producción de varias de sus unidades aumentaría. En esta entrevista con Forbes Perú, su CEO da detalles de algunos planes adicionales. Por ejemplo, indica que Uchucchacua y Yumpag se encuentran en un proceso de modernización para consolidar una operación de bajo costo y, con ello, una vida útil de mina (LOM) combinada de más de 10 años. En Coimolache, una mina de tajo abierto que inició operaciones en 2011, la empresa estimó que su producción crecerá este año y oscilará en 2025 entre 50.000 y 55.000 onzas de oro (la unidad produjo 48.120 onzas en 2024). García detalla que en el segundo trimestre de 2025 se obtuvo el permiso para ampliar el pad de lixiviación (la estructura utilizada en la minería para extraer metales valiosos) y proyecta que, en el tercer trimestre, se emita el permiso operativo para retomar operación en capacidad total.
En el caso de Julcani (ubicada en la región Huancavelica), la compañía proyecta una mayor producción gracias a un incremento de aproximadamente 20% en el tonelaje tratado respecto de 2024, dijo Buenaventura a la SMV. Al cierre del año pasado, la unidad minera produjo 4.504 onzas de oro, 1.402.786 onzas de plata y 727 toneladas de plomo. Para este año, la estimación de Buenaventura es que estas producciones se sitúen entre 7.500 y 9.500 onzas de oro, 1.500.000 y 1.800.000 onzas de plata y 800 a 1.000 toneladas de plomo.

En La Zanja, una operación de ex- tracción de oro a tajo abierto ubicada en Cajamarca que empezó en 2010, el CEO detalla que se están realizando trabajos de remanejo de mineral y perfilado de taludes, pero también la exploración de un yacimiento de sulfuros de cobre ubicado por debajo del área en producción. “El guidance que hemos puesto lo estamos cumpliendo”, asegura García sobre las proyec- ciones que se hicieron sobre su producción para este año.
Más allá de sus unidades en funcionamiento, hay proyectos con mucho potencial actualmente en la agenda de la empresa. Trapiche, de hecho, es uno de ellos. García sostiene que una vez que culmine su estudio de factibilidad, se podrán tomar decisiones sobre su futuro desarrollo. “Será la próxima piedra angular en cobre de Buenaventura”, menciona el CEO.
Sin embargo, este año el protagonismo lo tendrá San Gabriel. Esta operación aurífera, ubicada en la región de Moquegua, empezará su producción en el último trimestre de 2025, proyecta García. “La mina va a ser la columna vertebral de nuestra producción de oro en los siguientes 14 años. […] Tenemos un avance de casi el 90% de la construcción”, señala. De acuerdo con García, la in- versión que se habrá realizado solo en San Gabriel este año es de aproximadamente US$ 220 millones y se espera que produzca entre 110.000 y 150.000 onzas de oro al año.
UN FUTURO MARCADO POR LA SOSTENIBILIDAD Y LA INNOVACIÓN
García señala que hoy también la empresa está muy enfocada en el largo plazo. Para ello, indica, la compañía está invirtiendo mucho en exploración e innovación. El CEO sostiene que Buenaventura busca aumentar las reservas de sus unidades mineras.
De hecho, agrega que la expectativa es que sus minas subterráneas tengan reservas por lo menos para cinco años adicionales. En el caso de las minas de tajo abierto, la previsión es que estas tengan reservas para diez años como mínimo. “Buscamos que nuestras minas estén ubicadas entre el segundo y el tercer cuartil en costos a nivel mundial [costos moderados y altos, respectivamente]. Eso nos garantiza la sostenibilidad y predictibilidad que queremos dar al mercado”, destaca el CEO de Buenaventura.
En lo que respecta a la gestión de la sostenibilidad, justamente, hoy la empresa señala que el 100% de la energía con la que trabaja proviene de fuentes renovables. Asimismo, destaca que Buenaventura recircula entre el 89% y 92% del agua que utiliza en sus operaciones. Sin embargo, García hace hincapié en que la sostenibili- dad no es un tema exclusivamente medioambiental, sino que atraviesa a toda la organización. De hecho, el CEO destaca hoy que sus directores independientes son quienes presiden los diferentes comités que tiene la compañía (sostenibilidad, auditoría, operaciones etc). Ello, afirma, es una señal de transparencia y confianza hacia sus stakeholders.
Sobre el panorama local, García destaca el potencial que tiene el Perú a nivel minero. “Debemos apostar por la minería y debemos sentirnos orgullosos de que somos un país minero”, dice. Afirma que la preocupación por el avance de la minería ilegal en el país no debe ser algo que solo debe preocupar a las empresas de este sector, sino a todos los ciudadanos. “El Estado debe dar seguridad jurídica a la inversión minera. Un proyecto no se desarrolla en cinco o siete años. Puede tomar hasta 30 años. Es una inversión, entonces, permanente la que hay que hacer. Si vamos a cambiar las reglas de juego, dudo que muchas empresas mineras importantes de afuera y las que ya están operando en el país vean a Perú como destino de sus inversiones”, asegura.
REPUNTE EN 2024
Según la información publicada por la Superintendencia del Mercado de Valores, Buenaventura logró ganancias anuales de US$ 402,7 millones en el 2024, lo que significó un crecimiento de 1.928% en compara- ción con el 2023 (US$ 19,9 millones).
INVERSIÓN CONSTANTE
El Capex para el mantenimiento de las minas en funcionamiento de Buenaventura oscila entre los 100 y 150 millones de dólares.
DIGITALIZACIÓN DE BUENAVENTURA
La empresa ha desarrollado Yupay, un sistema de inteligencia artificial para optimización de procesos de exploración. Es una herramienta que predice el tipo de mineral que existe y hace una estimación de la cantidad de mineral que hay en una zona determinada.
MÁS CRECIMIENTO
Para su unidad Uchucchacua, Buenaventura estimó que en 2025 aumentará la producción de plata, plomo y zinc respecto al 2024. De hecho, ese año, esta operación procesó 2.364.035 onzas, 13.751 toneladas y 21.205 toneladas, respectivamente. En 2025, la compañía prevé que la producción se incrementará gracias a la optimización de las operaciones y que oscilará entre 2.700 y 3.200 onzas de plata, 16.000 y 18.000 toneladas de plomo y 23.000 y 26.000 toneladas de zinc, según dijo a la SMV en febrero.
En El Brocal, la empresa proyectó que la producción de cobre se situaría en un rango de entre 55.000 y 60.000 toneladas, gracias al aumento de la extracción en la mina subterránea del yacimiento. Cabe indicar que esta cifra sería bastante similar a la alcanzada el año pasado, cuando se produjeron 56.525 toneladas de cobre.
En Tambomayo (Arequipa), la compañía prevé una producción de plata que cerrará este 2025 entre 1.200.000 y 1.500.000 de onzas (el año pasado la empresa logró generar 1.412.092 onzas).
(forbes.pe)



 
                                    





