A pesar de un contexto complicado por diversos paros de transportistas y otros problemas políticos, el año 2018 marcó el inicio de operaciones para la empresa Peruvian Inka Fruit, fundada por Erick John Lava Laguna y Alfonso Mata, con el objetivo de llevar los productos de alta calidad de nuestro país a los mercados más exigentes.
Erick Lava, quien ejerce como gerente general, nos cuenta que empezó esta iniciativa luego de haber desarrollado una carrera profesional vinculada a la asesoría de empresas en sectores ligados a la exportación. Hoy, con Peruvian Inka Fruit, despacha mango, espárrago y granada a los mercados de Europa y Medio Oriente por vía marítima y aérea.
Apunta que al Viejo Continente envían unos 2.5 millones de kilos de sus productos, en tanto que a Medio Oriente va 1 millón de kilos. “Apuntamos a Medio Oriente porque vimos que tenía una perspectiva de incrementar volúmenes con su poder adquisitivo. En tanto, Europa es un mercado exigente que valora la calidad. La participación de los productos es un 80% mango y un 20% granada”, explica.
El devenir comercial para la empresa ha sido positivo en la historia reciente, pues, según señala el ejecutivo, su crecimiento en la temporada 2023-2024 fue de 80% en volumen frente a la temporada previa. Y en la actual (2025-2026) aspiran a crecer en niveles similares respecto a la 2024-2025. Estos resultados han determinado que se tomen nuevas decisiones de inversión.
Nueva planta, ampliación de cartera y mercados
Erick Lava revela que, con el objetivo de impulsar aún más los resultados positivos que han venido obteniendo, la compañía está invirtiendo en desarrollar una planta de 20 mil metros cuadrados para ampliar su capacidad de producción. Esta infraestructura se ubicará en Casma (Áncash) y se proyecta que empezará a operar en la primera semana de noviembre de este año.
“Además también vamos a diversificar, por ello estamos en planeamiento y consideramos otros productos como el holantao, la pitahaya y la palta, para que ingresen a nuestra cartera”, complementa. Y ofrece otro dato que refuerza el mensaje de expansión: ingresarán desde los primeros meses de 2026 a nuevos mercados, como Estados Unidos y Asia.
Hasta el momento, Peruvian Inka Fruit trabaja con unos 350 pequeños agricultores en zonas tan diversas como Piura, Lambayeque, Áncash, Ica, que son parte clave para su desarrollo actual y futuro. Es un ideal en el que, señala Erick Lava, instrumentos como la nueva ley agraria recientemente promulgada, serán importantes para que el país siga aprovechando su diversidad de climas con productos de alta calidad.
“Esto es trabajo de todos, de los agricultores, de los agroexportadores, de toda la cadena, que debe cuidar a la pequeña agricultura, pagar precios justos, apoyar técnicamente para enfrentar el cambio climático y obtener buenos productos”, concluyó.
(agraria.pe)