El Perú se destaca por una amplia cartera de productos de alta calidad y volumen que se exportan a diversos destinos, gracias a la colaboración público-privada en la identificación de nichos de mercado y la efectiva utilización de acuerdos comerciales suscritos a lo largo de los años. Ingresar a estos mercados rigurosos ha requerido años de intentos y negociaciones por parte de los empresarios peruanos, lo que ha posicionado a nuestro país como un proveedor de productos de alta calidad que cumple con estrictos estándares sanitarios.
Entre estos destinos exigentes se encuentra la Unión Europea (UE), un bloque económico que en los últimos 15 años se ha caracterizado por ser un mercado muy estricto, en términos de bienestar de su población. En junio de 2023, la UE público un nuevo reglamento sobre “productos libres de deforestación” (Reglamento UE 2023/1115) conocido como EUDR. Este reglamento pretende minimizar la contribución de la UE a la deforestación y degradación forestal a escala mundial, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y frenar la pérdida de biodiversidad.
Las materias primas bajo el alcance de esta norma son el ganado bovino, cacao, café, soya, el aceite de palma, madera y caucho y sus productos derivados. Estas materias primas y sus productos derivados solo podrán comercializarse en la UE si:
1. Están libres de deforestación.
2. Se han producido conforme a la legislación pertinente del país de producción.
3. Están cubiertos por una declaración de diligencia debida.
El término “sin deforestación” significa que los productos no deben producirse en tierras deforestadas después del 31 de diciembre de 2020 o, en el caso de la madera y sus productos derivados, que la madera se haya talado sin degradación forestal en el bosque respectivo después del 31 de diciembre de 2020. El reglamento se implementará a partir del 29 de diciembre de 2024.
La “diligencia debida” implica la recopilación de información, datos y documentación relativos al origen del envío y una evaluación de riesgos para determinar si existe el peligro de que los productos no cumplan con el reglamento. Si la evaluación de riesgos revela un riesgo no despreciable, deben adoptarse medidas para mitigarlo.
La diligencia consta de tres etapas:
1. Garantizar el acceso a la información
El importador europeo, debe proporcionar información sobre productos, cantidad, proveedor, lugar de producción y coordenadas geográficas de las parcelas de producción, además de asegurar el cumplimiento de la legislación del país productor, sobre todo en materia de derechos humanos, y asegurarse de que se han respetado en esta materia a las poblaciones indígenas.
2. Análisis y evaluación del riesgo
La empresa deberá utilizar la información recopilada en la etapa 1 para analizar y evaluar el riesgo de incumplimiento en la cadena de suministro, considerando factores como la clasificación de riesgo del país de producción, presencia de bosques y pueblos indígenas, el grado de deforestación o degradación forestal y problemas nacionales como la corrupción, el fraude, violaciones de derechos humanos, la complejidad de la cadena de suministro y el historial de incumplimiento de los proveedores. Este análisis de riesgos debe repetirse al menos una vez al año.
3. Adoptar medidas de reducción del riesgo
Si el análisis muestra un riesgo no insignificante, se deben adoptar medidas adecuadas y proporcionadas para mitigarlo. Los procedimientos y las medidas adoptadas para reducir el riesgo deben revisarse al menos una vez al año.
Exportaciones peruanas y el EUDR
De los productos sujetos al nuevo reglamento, el Perú exporta principalmente café, cacao, aceite de palma y madera; y sus derivados, a la Unión Europea. Entre enero y mayo de este año, se exportaron alrededor de US$ 200 000 000 de estas líneas de producto a la UE, mostrando un incremento del 97,52 % respecto a similar periodo de 2023.
En los primeros cinco meses de 2024, las exportaciones de café y sus derivados hacia la UE aumentaron en un 86,87 % en valor, alcanzando US$ 95 800 000; mientras que los envíos de cacao y sus derivados crecieron un 175 %, con un valor de US$ 94 900 000.
En el caso de los productos semimanufacturados de madera, las exportaciones disminuyeron un 38,59 % en valor, mientras que los productos manufacturados de madera bajaron un 49,79 %. La madera aserrada aumentó ligeramente sus exportaciones en 1,46 %, y la madera en bruto aumentó un 4,96 %. La exportación de aceite de palma disminuyó un 76,41%.
Al cierre de 2023, las exportaciones de café, cacao, aceite de palma, y madera y sus derivados a la UE alcanzaron un monto de alrededor de US$ 548 000 000, una caída del 29,64 %, respecto al 2022. El café fue la línea de producto más exportada con US$ 395 000 000, una disminución del 35,65 % respecto a 2022. A su vez, las exportaciones de cacao y sus derivados aumentaron un 36,08 %, alcanzando los US$ 128 000 000.
Por otro lado, los envíos de productos semifacturados de madera disminuyeron un 29,89 %, mientras que los productos manufacturados de madera aumentaron un 4,40 %. La madera aserrada disminuyó un 71,91 % y la madera en bruto aumentó un 28,36 %. Por último, la exportación de aceite de palma a la UE cayó un 97,41 %, exportándose US$ 951 048.
Producción en el Perú
En 2023, la producción de café, cacao, aceite de palma y madera aumentó respecto a 2022. La producción de café ascendió a 354 700 toneladas (un aumento de 0,44 % respecto a 2023), la de cacao a 140 627 toneladas (un crecimiento de 21,09 %); la de aceite de palma a 1 069 355 toneladas (un incremento de 20,08 %); y la de madera a 2 199 425 metros cúbicos (un aumento del 7,63 %).
Principales departamentos productores en el 2023:
- Café: San Martín (23,67 %), Cajamarca (22,18 %), Junín (18,53 %), Amazonas (13,11 %).
- Cacao: San Martín (38,59 %), Junín (22,14 %), Ucayali (12,23 %), Huánuco (10,28 %).
- Aceite de Palma: San Martín (45,43 %), Ucayali (42,59 %), Loreto (8,86 %), Huánuco (3.12 %).
- Madera: Ucayali (47.08 %), Loreto (20.54 %), Madre de Dios (15.64 %), Junín (6.59 %).
Como puede verse, el nuevo reglamento de la UE sobre productos libres de deforestación representa tanto un desafío como una oportunidad para las exportaciones peruanas. Mientras que la estricta normativa requiere ajustes y cumplimiento riguroso de diligencia debida, también posiciona al Perú como un exportador comprometido con prácticas sostenibles y responsables. La colaboración entre el sector público y privado será crucial para adaptarse a estas nuevas exigencias y mantener el crecimiento en mercados internacionales. Al adoptar medidas proactivas y garantizar la transparencia en la cadena de suministro, el Perú puede seguir destacándose como un proveedor de productos de alta calidad que respeta el medio ambiente y los derechos humanos. La próxima implementación de esta normativa subraya la importancia de la sostenibilidad en el comercio global y ofrece al Perú una oportunidad para liderar con el ejemplo en la producción agrícola y forestal sostenible.
Por lo pronto, teniendo en consideración la próxima entrada en vigencia de la reglamentación europea, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) está desarrollando instrumentos para formalizar las actividades agrarias con protección ambiental, con el objetivo de adoptar medidas que faciliten a los productores demostrar que los productos fueron producidos en zonas libres de deforestación, cumpliendo con la legislación del país de origen.
(lacamara.pe)