En un escenario digital que evoluciona rápidamente, la Inteligencia Artificial (IA) se posiciona como una fuerza capaz de moldear el futuro de la humanidad, transformando la manera que las personas interactúan con la tecnología y redefiniendo los límites de lo posible.
«El 2024 se proyecta como un un punto de quiebre tecnológico donde la IA no solo imita, sino que busca replicar el razonamiento y la percepción humana, hasta el punto que hasta los pocos errores que cometan estos sistemas, lo hagan de la misma forma que los humanos –una característica esencial para diversas industrias», explica Arturo Deza (Ph.D.), Profesor de la carrera de Ciencia de la Computación de la Universidad de Ingeniería y Tecnología (UTEC).
El especialista en Inteligencia Artificial, quien también ha sido Investigador Postdoctoral en el MIT y la Universidad de Harvard, añade que en el horizonte el próximo año se vislumbran tendencias tanto en la industria como academia relacionados a la IA. Desde avances en la NeuroAI, y en la IA Generativa en campos artísticos, así como su interacción con la capacidad humana que redefine el panorama laboral y tecnológico. En ese sentido, comparte cinco tendencias que continuarán sorprendiéndonos en el 2024.
1. “Small Data” y Aprendizaje “Zero”
Las redes neuronales que operan tradicionalmente al estilo “Big Data» han sido protagonistas en los últimos años y es muy posible que esto cambie en el 2024. En lugar de que las redes neuronales artificiales requerirán enormes cantidades de información, parámetros optimizables y supercomputadoras para descubrir patrones ocultos y realizar predicciones, se espera que empiecen con un movimiento de miniaturización de estas.
Con actuales movimientos de protección de la privacidad de clientes, protecciones por copyright a los artistas, y protección del medio ambiente – ya que entrenar redes neuronales masivas requiere de mucha energía para potenciar y refrigerar las tarjetas gráficas de entrenamiento – es muy probable que las industrias grandes como universidades empiezan a apostar por entrenar redes neuronales más pequeñas y con menos recursos, y en algunos casos sin data extra de entrenamiento.
2. Desarrollo de la Neuro AI
La evolución tecnológica ha dado paso a una nueva ola llamada NeuroAI, (Neuroscience-inspired AI) en el que se busca reforzar que los sistemas inteligentes, vean, escriban y razonen como los humanos. Actualmente los sistemas inteligentes cometen errores como confundir una bolsa de basura con una persona, o el de resolver acertijos de manera incongruente. Se proyecta que para el futuro estos fallos cometidos por el sistema, sean errores “justificados” que un humano también podría cometer. Esto sería un gran avance para aplicaciones que van desde chatbots hasta vehículos autónomos, no solo en la parte tecnológica, sino también en la parte legislativa de la toma de decisiones y generación de información coherente.
3. Posible despliegue masivo de la IA Generativa
La IA Generativa, tecnología de IA más reciente que puede crear piezas u “obras” sintéticas en disciplinas como el arte visual, la literatura, y la música, continuará evolucionando y llevará la innovación a territorios no explorados. El 2024 será un boom. Sin embargo, la IA todavía tiene como tarea pendiente extrapolar a crear un nuevo estilo artístico o musical, una característica que por ahora es exclusiva de los humanos.
El 2024 será sobre todo un año no solo de grandes logros de inteligencia artificial en esta área, sino también muchas de estas tecnologías se volverán un “commodity” al alcance de cualquier persona con internet. En particular se debe seguir con cautela el avance legislativo del copyright respecto a las “obras” que pueda crear una computadora ya sea con o sin ayuda humana y dependiendo de la data con la que fue entrenada. La legislación en esta área podría frenar el boom.
4. IA vs. capacidad humana: ¿colaboración o competencia?
LaIA seguirá ganando relevancia y superará a los humanos en tareas de alta demanda cognitiva como el diseño gráfico, la argumentación y síntesis de documentos, e incluso la programación por computadora. Esto sumado a la recesión global, pondrá en jaque a varios trabajadores que posiblemente antes creían que tenían un trabajo “cómodo y seguro”. En la actualidad las startups y grandes empresas están empezando a hacer “downsizing” y reduciendo el personal porque la IA está ayudando a que pequeños grupos de trabajadores puedan avanzar de forma más rápida que grandes grupos que no la utilizan.
Sin embargo, la gran sorpresa es que las tareas que requieren finura y destreza física, como la conducción, la carpintería, y la cocina, serán las menos afectadas hasta el momento, tareas que hace unas décadas se pronosticaban que serían las primeras en ser automatizadas.
5. Movimiento Open Source y Democratización de la IA
Finalmente, el avance del movimiento Open Source (Código Abierto) de la Inteligencia Artificial hará que muchas startups de países emergentes pequeñas puedan competir con corporaciones grandes del primer mundo. Al requerir menos capital para correr modelos inteligentes, multiplicado por factores como el teletrabajo y la recesión global, es poco probable, pero también posible, que el 2024 nos sorprenda con una burbuja tecnológica de la IA para empresas y startups del primer mundo – creando como contraparte nuevas oportunidades de empresas y startups de IA en Latinoamérica.