El cambio climático ya es una realidad y sus efectos en la Tierra se hacen cada vez más visibles y frecuentes. Acorde al último informe del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC, siglas en inglés), las actividades humanas han causado un calentamiento global de aproximadamente 1.0 ºC en comparación a los niveles preindustriales, y para el 2030 y 2050 el calentamiento global podría aumentar en 1.5ºC de continuar con acciones no favorables para el ambiente.
De cara a ello, las empresas han implementado el Green Computing o Green IT, una estrategia que nació en Estados Unidos en 1992 diseñada para promover el uso de la eficiencia energética en los recursos tecnológicos y reducir su impacto ambiental.
En ese sentido, Gerardo Mena, IT Manager de Sika, comparte algunos acciones que el Green Computing impulsa en favor del ambiente y las organizaciones:
- Reducir el uso de papel en las empresas: A través de iniciativas como el uso de la impresión segura, es decir imprimir solo lo que se necesita, se logra disminuir la deforestación y la pérdida de fauna silvestre. Según Mena, mediante esta acción se puede llegar a reducir la tala de 17 árboles por año aproximadamente que hubieran sido usados para la elaboración de una tonelada de papel blanco.
- Minimizar el consumo energético: La virtualización y centralización al máximo de los sistemas informáticos permite disminuir el consumo de energía. Además, el fomento del uso del Cloud Computing, una tecnología que permite el acceso remoto a softwares, ayuda a reducir las emisiones de CO2.
“Desde nuestra experiencia se ha reducido la generación de CO2 a 11.82 toneladas por año, siendo el objetivo para el 2024 llegar a 5.33 toneladas de CO2 por año”, declaró Mena.
- Fomentar el reciclaje y la gestión de recursos de TI: La adquisición de aparatos tecnológicos de ciclos de vida prolongados, alto rendimiento y durabilidad contribuyen a no tener que cambiar constantemente los aparatos. Esto contribuye a tener mayor eficiencia en cuanto a recursos y energía, significando también un menor gasto para la empresa. Por ejemplo, a través de la actualización de equipos de impresión y la centralización de los servicios en una empresa, se puede ahorrar el 80% del consumo eléctrico, reducir la emisión de CO2 en un 92% y mermar en un 94% los residuos electrónicos, según el ejecutivo.
“Somos conscientes del cambio climático y sus efectos a corto y largo plazo. Por eso, desde Sika venimos trabajando en hacer nuestros procesos más amigables con el medio ambiente, bajo la implementación y realización de acciones concretas que son parte del Green Computing y que nos están permitiendo reducir nuestros impactos ambientales. A pesar de que sabemos que el Perú no es el país principal emisor de CO2, sí es un país vulnerable al cambio climático y por eso desde las empresas debemos ser conscientes de nuestros procesos industriales”, señala Gerardo Mena, IT Manager de Sika.