PepsiCo anuncia hoy el programa Agricultura Positiva a partir del cual se ha fijado tres nuevas metas para 2030:
Primero, ampliar la adopción de prácticas agrícolas regenerativas a 2.8 millones de hectáreas, equivalente a casi el 100% de los terrenos utilizados por los agricultores a nivel mundial para cultivar y proveer insumos para PepsiCo. Estas prácticas contribuirán a la recuperación y conservación del suelo mediante el uso de materia orgánica y cultivos de cobertura que permiten mejorar la fertilidad del suelo, controlar la aparición de plagas e incrementar la biodiversidad.
Para finales de esta década, la compañía podrá reducir, al menos, 3 millones de toneladas de emisiones de gases de efecto invernadero gracias a estos esfuerzos a partir del uso de tecnología inteligente que permite, entre otras cosas, un uso eficiente de insumos agrícolas, estrategias de digitalización y ahorro de agua. En conjunto, estas medidas permitirán a la compañía generar una menor huella de carbono en los cultivos.
PepsiCo también seguirá extendiendo su red mundial de granjas de demostración, la cual aumentó a más de 350 en 2020. De éstas, más del 85%, ha puesto en marcha prácticas de agricultura regenerativa. En Latinoamérica, en el último año se implementaron 7 nuevas granjas de demostración en Argentina, Brasil y México, y se proyecta replicar estos esfuerzos en los demás países de la región en los próximos años, incluido Perú, implementando sistemas de riego más eficientes, digitalización y prácticas tecnológicas de nueva generación.
Segundo, mejorar el sustento de más de 250,000 personas en su cadena de valor agrícola y en las comunidades en las que opera, incluyendo el empoderamiento económico de las mujeres. PepsiCo centrará su trabajo en las comunidades agrícolas más vulnerables y seguirá avanzando en este objetivo mediante alianzas con socios estratégicos que, en Perú permiten implementar programas e iniciativas como:
- Ella Alimenta al Mundo (She Feeds the World), programa de la Fundación PepsiCo en asociación con CARE que tiene como objetivo mejorar la salud, nutrición e higiene y promover la generación de ingresos a través de la diversificación de la producción agrícola para hogares vulnerables en las regiones de Lima, Ica y Piura. El programa, que cuenta con una inversión de más de US$ 3 millones por parte de la Fundación, tiene la meta de impactar a más de 400,000 personas en estas regiones del territorio nacional.
- Centro de Desarrollo Agrícola de PepsiCo (CEDAP), único en su tipo en Sudamérica, ubicado en Pachacamac, está centrado en la investigación y desarrollo de variedades de semillas y tubérculos. Mediante este, además de atender las necesidades del negocio a nivel de investigación, se brinda acceso a los agricultores locales a variedades más productivas, lo que les ayuda a optimizar el uso de recursos y mejorar el rendimiento de sus cosechas.
“En países en desarrollo, las mujeres representan casi la mitad de la mano de obra agrícola y trabajan a menudo sin formación, herramientas adecuadas y derechos sobre sus tierras. De acuerdo con la FAO, si tuvieran el mismo acceso a los recursos que los hombres, podrían aumentar el rendimiento de sus cultivos entre un 20 y un 30%, reduciendo el número de personas con hambre en el mundo en hasta 150 millones. La inserción de la mujer en el agro es indispensable, no solo otorga una ventaja comercial competitiva en términos de crecimiento y prosperidad, sino que genera también una importante derrama económica y social. En PepsiCo, reconocemos su valor, su determinación y su talento”, señaló Paula Santilli, CEO de PepsiCo Latinoamérica.
Tercero, producir de forma sostenible el 100% de sus ingredientes clave, incluyendo no sólo cultivos de origen directo (papas, maíz, avena y naranjas), sino también los cultivos de terceros, como aceites vegetales y cereales. Desde 2020, los cultivos de origen directo de PepsiCo son producidos 100% de forma sostenible en 28 países. A nivel mundial, casi el 87% de éstos se obtienen de forma sostenible a través del programa SFP(She Feeds the World – Ella alimenta al mundo). En Latinoamérica, 98% de los suministros de papa están certificados por este programa, el cual refleja las mejores prácticas sociales, medioambientales y económicas.
«Cualquier plan para hacer frente a los desafíos urgentes que enfrenta el sistema alimentario mundial debe contemplar la agricultura, fuente de alimentación para miles de millones de personas y una herramienta clave para lidiar con el cambio climático y la desigualdad», comentó Ramón Laguarta, CEO de PepsiCo.
Parte importante de Agricultura Positiva es contribuir a transformar y mejorar la forma en que los alimentos son producidos y consumidos. Junto con el Foro Económico Mundial y varios aliados del sector público y privado – PepsiCo lanzó en enero de este año el concepto de “centros de innovación alimentaria” como el que será puesto en marcha en Colombia a finales del 2021. Dichos centros se utilizarán para identificar los cuellos de botella de la cadena de valor, permitir el intercambio de información y ofrecer soluciones a escala para beneficiar a los sistemas alimentarios locales usando tecnologías e innovaciones agronómicas.
Agricultura Positiva es un paso más en el camino de PepsiCo Positive que se ha trazado la compañía y se suma al reciente anuncio de PepsiCo de duplicar su meta de cambio climático comprometiéndose a tener emisiones netas cero para 2040 y a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en más del 40% para 2030 en toda su cadena de valor.